Fue un partido
raro en Santiago. Regalamos los primeros 20 minutos y Chile nos mató. A este
nivel de competencia no se puede otorgar nada gratis. El primer gol fue un escándalo
y el equipo sintió la pegada. Después recompusimos, tuvimos varias y entraron
solo dos. En otros tiempos Perú iba perdiendo 0-3 y ya pedían la hora. Ahora
tuvimos rebeldía, amor propio y mucha actitud.
Yo pensé que el
2-3 lo empatábamos, el equipo estaba allí. Es más, creí que podíamos darlo
vuelta. Otra vez, nos desesperamos, hay que saber manejar los tiempos. “Este equipo
tiene un corazón grande, pero hay que saber cómo usarlo”, ha dicho Pizarro; que
se jugó un partidazo en Chile.
Quedan 14 fechas
más. A este equipo me lo banco, vamos a pelear. Seguro perderemos más partidos,
también ganaremos otros; pero las chances están intactas. Estos chicos nos han
demostrado que podemos irnos siempre con la frente en alto. Hay en ellos hambre
de gloria, tenemos que apoyar todos.